>Siren parece ser la única de ambas que acepta el té mientras que Erzebeth ni siquiera le presta atención, dejando al sirviente en una escena incómoda esperando que la sucubo acepte la taza, pero el ver qué es inútil, el vallhell simplemente hace un gesto con su mano para que el sirviente deje la bandeja en una mesa y se retire, lo que hace momentos después de haber recibido dicha indicación
El gusto es todo mío, señorita Michelle
>Diría ante la cortes presentación de Siren mientras que, por otro lado, Erzebeth tenía una opinión un poco distinta sobre la misión que el señor de la guerra les encomendaba, este escucharía pacientemente todo lo que la sucubo tendría para decir, Victed consideraba lógica la reacción que Erzebeth habría tenido al escuchar todo lo que había tenido que decir, aún así, no puede evitar soltar una pequeña risa después de que la mujer termina de hablar, parecía no tener temor alguno de Erzebeth, aunque no por eso subestimaba sus fuerzas o le faltaba el respeto, pero siendo un guerrero de su talla, simplemente no se dejaría intimidar por nadie, ni siquiera por el mismísimo sacerdote supremo del clan
Discúlpeme, pero no tiene nada de que preocuparse, ¿De verdad cree que las mandaría a su suerte a un lugar como el páramo? No, solo irán a la frontera, no creo que tengan mucho problema con los escorpiones del desierto del tamaño de un nini doméstico gato
>Era en cierta forma entretenida ver cómo la personalidad novata de Siren chocaba con la de Erzebeth, una mucho más experimentada que la oni, mientras ambas hablaban, el vallhell aprovechaba para levantarse de su trono y dirigirse hacía un ventanal de la habitación para observar lo que había en el exterior. Una vez ustedes terminan de hablar, el señor de la guerra se gira hacia ustedes
Recompensa, si, por supuesto que habrá recompensas, solo que no creí necesario tener que abrir con eso desde el principio, en fin...
>Coloca su puño frente a el, pueden ver cómo una energía oscura comienza en concentrase en su puño hasta que, haciendo un gesto como si dibujara un círculo en el aire, un portal se abriría de dónde salen dos objetos, uno de ellos era katana, esta tenía un color azul y desprendía un viendo gélido de su hoja
